Originario de Cerdeña, el perejil (Petroselinum crispum) se conoce ya desde la antigüedad aún cuando parece que fue utilizado, no tanto en cocina cuanto en las tumbas para honrar a los difuntos. Recién hacia la Edad Media el uso de esta hierba se vuelve habitual en cocina.
Es la hierba condimentaria más utilizada, tanto para adornar como para cocinar. Como ingrediente de muchas comidas y salsas, tiene el poder de revivir los sabores de las otras hierbas.
El perejil contiene grandes cantidades de vitamina C y A y minerales como el hierro, calcio, fósforo y manganeso. Es potente como diurético, ayuda a eliminar los gases regulando el tránsito intestinal, es digestivo, antiespasmódico, estimulante del músculo uterino, mejora las afecciones hepáticas y baja la tensión arterial.