Nativa del área mediterránea, el romero es actualmente ampliamente cultivado en otras partes del mundo, aunque se desarrolla preferentemente en un clima cálido y relativamente seco. La planta toma el nombre de rosmarinus, un término latino que significa "rocío de mar". El romero es muy popular como hierba de cocina, especialmente en los platos mediterráneos y también es utilizado como un aditivo de jabones, champúes y otros cosméticos. Se le atribuyen propiedades como astringente, antiséptico, estimulante de la circulación (mejora la memoria) y crecimiento del pelo. Recientemente, el romero ha sido objeto de investigaciones debido a su potencial prevención del cáncer y sus propiedades antibacterianas.
Un dato curioso: en el herbario de Banckes (1525) dice: "...si hueles romero a menudo, te conservarás joven".