En árabe hummus significa garbanzo y es el nombre dado a éste placentero dip originario de Oriente Medio. Es riquísimo y fácil de preparar.
Lo podemos hacer a mano en un mortero o en la procesadora de alimentos.
En el vaso de la procesadora (o mortero) picamos un diente de ajo, si preferimos podemos poner ajo asado para un saber más ahumado y sutil. Agregamos un frasco de garbanzos escurridos (aprox. 400 grs.), tres cucharadas de aceite de oliva, 3 cucharadas de tahini, (el tahini es una pasta de sésamo, a veces cuando no tengo la suplanto con unas gotas de aceite de sésamo ), jugo y raspadura de medio limón, sal, pimienta, una pizca de comino Monte Cudine y procesamos.
Tiene que quedar cremoso y suave, si nos gusta más ligero agregamos unas cucharadas del agua de garbanzos o yogur natural. Rectificamos sabores y listo!
Lo podemos guardar un par de días y es fantástico para acompañar unos pancitos de pita tostados, vegetales como bastones de zanahoria o tomatitos, unos palitos de queso, totopos o esas riquísimas focaccias que preparamos anteriormente.