Todos los martes y a veces también los sábados voy a la feria del barrio ,me encanta, me seduce, es una fuente de inspiración a la hora da armar mis platos. Esa abundancia de frutas, verduras, quesos, pescados, realmente me deleita , y es así que algunas veces terminé comprando de más.
Mi debilidad son las hierbas aromáticas , verlas radiantes de frescura y perfume me resulta irresistible. Así que me fue necesario idear e investigar un poquito sobre qué hacer cuando sobran.
Primero que nada, vamos a cuidarlas para que nos duren más. Todas las hierbas de hoja tierna como el perejil, la albahaca, el cilantro, la menta, las podemos poner en un frasquito con un poco de agua, como las flores, y cubrirlas con una bolsa de nylon y a la heladera.
Prueben de dejar la albahaca en un florero en la cocina, además de quedar divina , perfuma el ambiente.
Esto permitirá alargar la vida de nuestras hierbas.
Otra forma cómoda es, picar las hierbas, ponerlas en cubeteras de hielo y llenarlas de aceite de oliva o agua y llevarlas al freezer. Se conservan bastante bien ( el cilantro sufre un poquito más) y son prácticas para agregar a la comida ya en porciones.
También me gusta hacer “pestos” con ellas, y mantenerlas en frasquitos en la heladera, por un par de semanas más tenemos hierbas verdes y con todo su potencial.